Infiltrándonos en la base de Billy Jou Jou Jimmy

04/04/2020 14:19

¡Hey cotillas!

Hoy, charlando con Piningozon, DenisOwO y JoselWTF, pensamos en irnos de fiesta pero sin ligoteos ni nada, tan sólo quisimos despejarnos de la vida tan movidita que tenemos.

Quedamos en el centro y juntos entramos a la discoteca.

Realmente estaba vacía, pues no habían más de 6 personas contándonos a nosotros...

En plena fiestuqui, nos interrumpió un viejo amigo mío llamado Arius 870 gritando mi nombre una y otra vez.

Me pedía ayuda porque un amigo suyo llamado Uby4 había tenido un montón de hijos y me explicó que necesitaban mi ayuda porque yo ya he pasado por esta situación.

Fuimos al muelle, lugar en el que la madre empezó a parir.

Realmente yo sólo tuve tres hijos, nunca me había imaginado que dos pingüinos tuvieran tantos tantos tantos retoños...

(luego veréis una foto mejor de sus hijos... En ese estado no es recomendable enseñároslo).

Yo ya me imaginaba que pasaríamos por otra de nuestras locas aventuras con tal de criar a un montón de niños, pero no rechacé la oferta de aconsejar a Uby sobre qué hacer con sus hijos.

Al principio le dije que cuidara a todos sus sangre de su sangre, sin embargo el padre me dijo que no eran sus primero hijos, así que mi retorcida mente le aconsejó que los dejase en adopción o les ignorara.

Misteriosamente me dio las gracias.

Mientras los niños gritaban llorando, Piningozon se colocó a mi derecha y me dijo que tenía muy malas noticias.

Me contó algo terrorífico...

Me explicó que anoche fue a comprar una bolsa de barras de pan porque le quedaba media barra y tiene la costumbre de empezar el día alimentándose de pantumaca (pan con tomate).

Estaba yendo a un supermercado que le quedaba bastante lejos de su hogar (aunque no os lo creáis, él vive en una estación de trenes) y en pleno paseo, vio a un pez de su tamaño que se movía a dos patas mientras sostenía un bazooka en uno de sus hombros. El pez gigante sacó una especie de talki-walki y comentó algo acerca de una explosión que causaría la noche del día siguiente, o sea, en nuestro hoy. Mientras sostenía el aparato cerca de su cabeza, ingresaba en una especie de tubería que le bajó hacia el subsuelo en plan ascensor.

Ese pez fue muy familiar para Piningozon, pues estaba casi seguro de que se trataba de Billy Jou Jou Jimmy.

Si... Esos bichos verdes son los hijos de Uby4.

Tras contarnos todo esto, Pinin nos contó que necesitaríamos dinero para adentrarnos en la base de Billy Jou, a lo que Arius 870, ignorando el problema de su amigo Uby, nos dio la idea de irnos a atracar a un banco llenísimo de oro.

Y así hicimos.

Fui a avisar a JoselWTF que le había perdido de vista, pero le volví a encontrar tras una intensa búsqueda por la ciudad.

Le conté a mi amigo que Piningozon, Arius 870 y DenisOwO se habían ido a atracar un banco para obtener mucho dinero ya que necesitábamos el material necesario para adentrarnos en la guarida de un pez que planeaba la destrucción de la isla, y a pesar de sus carcajadas y bromas al respecto, fuimos buscando el banco que nos dijo Arius de atracar.

Logramos encontrarnos con Pinin y Arius y cuando me acerqué, había un policía aparentemente patrullando la zona.

Mientras yo contactaba con Ryuzaki0 para que nos ayudase en ésta misión, Arius miró disimuladamente al policía mientras Piningozon le preguntó que cuál era el problema (probablemente porque no lo había visto).

Sin pensárselo dos veces, Arius cogió al policía por la espalda y nos gritó que era nuestra oportunidad, así que corrimos hacia dentro dejando a nuestro aliado con el policía.

Era nuestra oportunidad de ir al banco y sacar todo el dinero que pudiéramos.

Al entrar, Ryu ya estaba dentro y Piningozon se las ingenió para pasar por debajo de una puerta metálica.

Por lo que nosotros decidimos hacer lo mismo.

Me costó un poco porque he engordado y no sé ni cómo, pero logré entrar que es lo importante.

Cada uno cogimos dos bolsas que estaban ahí junto a un cartel que ponía "gratis" (no os flipéis, las bolsas estaban vacías).

Llenamos las bolsas de dinero y yo, al ver que no me quedaba más espacio, pretendí abrir esa caja fuerte que véis arriba.

Tras los nervios que me provocó Piningozon, me volví loco y destrocé la caja fuerte lanzando una bola dark que hizo explotar todo lo que estaba en su interior.

Maldiciéndome, cogí más oro del que estaba esparcido por ahí y llené un par de bolsas.

Nos fuimos empujando a una mujer que nos trató de frenar, pasamos por debajo de la puerta metálica y nos fuimos corriendo mientras una pesada alarma repetía el mismo sonido una y otra vez.

Fuimos a la bahía atravesando por una plaza distinta a las anteriores que he visto, pues había una fuente con un pez en medio y una especie de jaula al aire libre que parecía vivir alguna especie de animal. De verdad que FreePenguin es super grande.

Continuamos el camino.

Llegamos a un muelle que permitía bajar al mar con la ayuda de unas escaleras. Ryuzaki y Josel fueron los primeros en bajar y se quedaron en frente de una cueva aparentemente antigua y musgosa que lanzaba una luz verde. Poseídos por la curiosidad, se atrevieron a adentrarse por aquel lugar nada recomendable.

Piningozon tuvo la malísima idea de dejar el oro sobre ese muelle, y digo malísima porque no somos los únicos ladrones de la amplia isla.

Tras decirle que ni se le ocurriese dejar eso ahí, nos adentramos en aquella cueva que, siendoos sincero, no tenía nada que ver con Billy Jou Jou Jimmy... Vamos, creo.

Aquella cueva conducía a una guarida bajo tierra permitiendo el lujo de ver el mar desde dentro y no sólo eso, sino que había un amplio agujero sin suelo que conectaba directamente al mar, teniendo una silla justo en medio.

Ryu, tras no conocer todavía nuestro plan, le contamos el asalto a la base del pez mutado a lo que su adrenalina no le permitió poner ninguna objeción.

Sin embargo, tuvimos que contarle quién era Billy Jou Jou Jimmy a Josel, pues nunca había escuchado semejante nombre.

Y el muy idiota, mientras le explicábamos quien era Billy Jou, saltó a la silla que estaba en medio del agua. Mientras se acomodaba y escuchaba nuestras palabras, unas cuerdas cayeron del techo atrapándolo, y acto seguido unos tiburones aparecieron y le rodearon.

Pinin y yo mantuvimos una discusión ya que nos culpamos mutuamente tras decir que el otro fue el culpable de que ése pez mutara.

Piningozon se protegía afirmando que fui yo el que cambió la pecera de sitio, y yo le decía que él le echó ácido sulfúrico a su mascota.

Tras esa estúpida discusión que no llegó a ningun lado, me fui a contemplar el mar a través de la ventana, y escuché a Josel diciendo que se había comido a los tiburones que le rodearon.

Tras merendar mi amigo, Arius nos explicó que ése pez es capaz de ocasionar cualquier problema en la isla, por lo que debíamos usar el oro robado para comprarnos ropa de incógnito y adentrarnos de una vez por todas en su base.

Tuvo una buena idea, pues hasta ése momento el dinero no era clave en nuestro plan.

Fuimos hasta la tienda de ropa.

Ninguno tenía bien claro qué elegir, y menos yo que no sé elegir ropa de incógnito...

Todos estuvimos bastante pensativos, pues había muchísima ropa y teníamos que elegir la menos sospechosa.

Ryuzaki tuvo una grandiosa idea:

Nos explicó que la ropa que menos hiciese sospechar a Billy Jou sería disfraces de peces, pues creería que somos de su misma especie.

Traa decidirlo, elegimos los mejores trajes para peces que vimos.

No nos pudimos tomar en serio la situación, pues esos disfraces hacían bastante gracia. El humor conquistó nuestros corazones y entre Pinin, Ryu, Arius y yo hicimos la bandera de España 🇪🇸

Denis regresó después de haberse perdido.

Se quedó paralizado tras ver la "payasada" que estábamos haciendo, pero nosotros no nos detuvimos en nuestro plan en ningún momento. Le cogimos un traje de pez y cuando se lo puso nos pidió explicaciones.

A parte de la explosión que causaría esta noche, le contamos también que nos infiltraríamos en su base para arruinarle el plan que se llevaba entre manos, o entre aletas mejor dicho.

Tras tener todos trajes, pusimos rumbo hacia donde Piningozon le pilló entrando.

En la foto de arriba podréis ver que faltan Arius y Josel, y os explicaré el por qué:

En la esquina inferior derecha de la imagen se puede contemplar una especie de círculo encima de otro círculo. Bien, pues esos círculos tienen un botón que tras pulsarlo se forma una especie de tubería-ascensor. Por ahí vio Pinin a Billy Jou metiéndose, así que Arius y Josel entraron los primeros para comprobar que no hubiera nadie vigilando dentro.

Regresó Arius y ocurrió lo siguiente:

Tras la pregunta de Arius, yo respondí que no sería mala idea entrar por la misma puerta que entraron ellos, así que todos accedimos adentro.

Aquél lugar, lo que pude ver, contenía una sala de entrenamientos para mejorar la puntería y la musculatura.

Además, tenía unos aparentemente portales que conducían a distintas zonas de la isla y una mesa de reuniones.

Denis, atónito por lo que vio en un cartel, nos explicó que el malvado de Billy Jou había secuestrado a unos pingüinos que pertenecen a la isla de Club Penguin Online.

No sabíamos cómo lo había hecho, lo que sí sabíamos es que debíamos rescatarles con vida, pues se les veía la cara de inocentes y no merecían estar secuestrados, tal y como nos indicaba aquél cartel que contenía un letrero con la palabra "capturados".

Aprovechamos esa mesa y sillas para descansar mientras formábamos el plan para entrar.

Tras la orden de Pinin, todos nos preparamos para adentrarnos por aquella cueva con el terror de que algún sirviente suyo acechara adentro.

Dentro tan sólo había un cangrejo enjaulado dentro de unos barrotes.

Ryuzaki nos frenó la aventura diciendo que tenía algo muy importante que contarnos.

Resulta que él había visto a este tipo de cangrejos rondando por la isla y en más de una ocasión contempló a los cangrejos comiéndose a pingüinos, por lo que debíamos tenerlos vigilados por si éstos pequeñines se escapaban de aquella cárcel que los encerraba y decidía atacarnos.

Por un momento, el cangrejo empezó a hacer sonidos con sus pinzas, lo que provocó mi confusión, pues creí que era mis tripas haciendo borborigmo (el sonido que escuchamos cuando tenemos hambre).

A la misma vez que lo pensaba en voz alta, Denis se fijó en los ojos de otro cangrejo que estaba rondando por la cueva y se enteró de algo espeluznante...

Tras enterarnos de que tenían cámaras en los ojos, decidimos subir hacia unas escaleras que conducían hacia arriba. Pero no sólo corrimos por si nos vigilaban.

Había otro cangrejo suelto oculto bajo una piedra que lo podréis ver en la imagen de arriba.

El cangrejo parecía que no nos perseguía, pero al estar tan cerca de nosotros decidimos huir de aquél lugar.

Subimos a la parte de arriba y notamos una exagerada calor acompañada de un vapor que flotaba por el aire. Se trataba de lava.

Había lava por todas partes y todo dejó de cobrar sentido para nosotros.

¿Cómo un pez podía mantener una base secreta tan amplia y con tanta maquinaria?

¿A caso no era el único al que debíamos temer?

Todo era muy confuso, pues nos dimos cuenta de que nuestros disfraces de incógnito eran inútiles.

En la zona que acabábamos de llegar se encontraba un guardia de seguridad.

Tras todos los gritos que soltaba el aparentemente guardia de seguridad, cogí al hombre por la espalda y Arius le metió una serie de puñetazos que lo dejaron desmayado.

Quisimos pasar por una puerta, pero estaba cerrada.

Como no supimos por dónde pasar, vimos un andamio en el tejado que conducía a varias zonas.

No supimos como subir hasta ahí, excepto Denis. Con la ayuda de su gancho, apretó el gatillo y el gancho salió disparado hacia el andamio y antes de que él saliese disparado, nosotros nos cogimos unos a otros por las patas.

Logramos subir todos y nos pusimos en marcha.

Entramos en una zona que... no sé deciros para qué era.

Arius dijo que tenía un plan, pero antes de contárnoslo, alguien escondido atacó por sorpresa a Piningozon, dejándole una horrible herida en el estómago.

Tras nuestras caras de shock y horror al extremo, Josel se llevó a Piningozon afuera de aquella zona mientras Ryu, Denis, Arius y yo quisimos vengarnos del atacante.

Tras nuestra furia, Denis lanzó su gancho apuntando hacia aquella voz, y tras escuchar un grito desgarrador, Ryu y yo lanzamos juntos una bola dark provocando una explosión en la zona que nos hizo salir corriendo de ahí.

Continuamos andando por el andamio en busca de nuestros amigos.

Sin embargo, Arius nos detuvo el camino.

Le vi una sonrisa formándose en su rostro y aseñaló hacia abajo. Ahí estaba Piningozon, tan tranquilo a pesar de seguir teniendo esa herida.

Todos nosotros saltamos hacia abajo gritando su nombre una y otra vez.

Nos contó que él y Josel habían entrado en una sala preciosa ya que había una piscina que le quitó el dolor del estómago.

Acto seguido, Denis y Arius le cerraron la herida gracias a la cuerda del gancho de Denis.

Tras limpiar, desinfectar y cerrar la herida, Pinin nos llevó hacia la sala en la que Josel nos esperaba.

Allí estuvimos transmitiendo los planes de cada uno.

Yo di la idea de atacar con sigilo (que no nos escuchasen, hacer el mínimo sonido posible ya que los gritos que hemos provocado y el sonido de la explosión eran más que suficientes para que se enterasen de que algo no andaba bien).

Mientras tanto, Ryuzaki tuvo la idea de avisar a la mafia que nos trajo el cargamento de dinamita, que viniesen con una de las cajas en helicóptero y así explotar la base de Billy Jou Jou Jimmy directamente, sin embargo los demás nos rechazamos su plan porque debíamos rescatar a los pingüinos secuestrados.

Josel descubrió una salida que nos venía genial por si teníamos que huir.

Tras acordarnos de los secuestrados por Billy Jou, nos pusimos en marcha y seguimos buscando el lugar en el que los capturados se encontraban.

Decidimos separarnos por un corto período de tiempo para encontrar a Billy Jou más fácilmente, pero estuvimos separados por poco tiempo ya que no era buena idea separarnos, pues juntos somos más fuertes que cualquiera...

...o eso creíamos...

Volvimos a subir por el andamio con la ayuda del gancho y nos separamos en grupos de tres: Denis fue con Pinin, Arius con Ryu y Josel fue conmigo.

Josel y yo encontramos una sala llena de cuadros con cangrejos que, por sospecha nuestra, son aliados de Billy Jou.

Pregunté acerca de su paradero en esta enorme base secreta, pero él no supo responderme.

Tras retirarnos de aquel lugar, nos reunimos todos en el inseguro andamio, y digo inseguro porque no paraba de pensar que eso se caería por todo nuestro peso.

Pasamos puerta por puerta, camino por camino...

Todo. Lo habíamos recorrido todo.

Sin embargo, a escondidas vimos un camino que nos demostraba la única puerta por la que no habíamos entrado ya que pasó desapercibida para todos nosotros.

Tras entrar, vimos algo espeluznante...

Había un pez mutado controlando un enorme aparato que lanzaba rayos hacia el oscuro cielo.

Nos quedamos perplejos tal aquél escenario, apenas pudimos pronunciar palabra...

Tras girarse aquel pez mutado, vio a seis pingüinos disfrazados de pez, lo cual se dio cuenta de que éramos unos falsantes.

Tras acercarnos todos a él, Denis le dijo que era un estúpido pez, y cuando continuó la frase diciéndole "si, eso eres" el pez me metió una espada en todo el hígado.

Tras recibir su espada en mi interior, empecé a sangrar.

Arius me cogió, me abalanzó contra el suelo y me protegió bajo su propio cuerpo a modo de escudo mientras me hablaba para evitar que perdiese el conocimiento.

Sin embargo, yo no me sentía bien obviamente, acababa de recibir una estocada. Sentía un dolor interno muy insoportable y empecé a verlo todo borroso y distorsionado. Es muy difícil de explicar.

Mientras tanto, Piningozon era incapaz de moverse, pues el miedo lo paralizaba. Además, su misión me parece que no es acabar con Billy Jou, sino regresarlo a la normalidad... O eso creo, nunca nos ha comentado éso.

Tras una impresionante paliza a base de apuñalamientos con espada por parte de Ryuzaki y Denis y tres flechas inyectadas en la espalda gracias a Josel, el pez acabó muerto.

Arius tuvo una gran idea para mantenerme con vida: intercambiar un hígado de uno de los inocentes por el mío, pero sería muy arriesgado ya que desconocíamos si ese plan funcionaría...

Su plan consistía en sacrificar a uno de los inocentes que se hallaban congelados, y esa idea a pesar de no gustarnos mucho, les tocaba jugársela, pues querían protegerme.

Antes de elegir a qué inocente sacrificar, Denis gritó que si había alguien que supiese traspantar órganos, lo cual yo creía imposible que alguien de los presentes estuviese lo suficientemente capacitado para realizar un trasplante de hígado.

..y sí, he dicho "creía".

Josel admitió ser médico, lo cual nos sorprendió a todos.

Mientras Piningozon me preguntaba si me encontraba bien, apareció el jefe final, el malvado pez mutado que pretendía destruir la isla...

Billy Jou Jou Jimmy.

Era demasiado intimidante... Una oscura aura le rodeaba, tenía un enorme bazooka en su hombro izquierdo y una espada aún mas afilada que la de su secuaz.

Era tan temible que no supimos cómo reaccionar tras aparecer aquel feroz enemigo.

Arius fue corriendo a las vitrinas donde los secuestrados se hallaban congelados y cogió a una pingüina morada sin pensar en quién elegir, pues ya no le importaba asesinar a algún inocente, su prioridad fue salvarme la vida.

Denis se acercó mucho a Billy Jou aparentemente para atacarle, pero el pez mutado le frenó bajo la amenaza de que podía disparar si quisiera, obligando a Denis a alejarse.

A la misma vez que Billy Jou hacía retroceder a Denis, Arius me tiró al suelo y se interpuso delante de mi para evitar que yo saliese mas lastimado de lo que ya estaba.

Ryuzaki me dio una idea: sacar mis poderes dark para enfrentarme a Billy Jou Jou Jimmy, sin embargo era algo imposible en aquel estado, no podía ni hablar apenas.

Mientras tanto, Arius me contó que yo no tenía nada que temer ya que conseguirían sustituirme un hígado congelado por el mío desangrado y reventado.

Mientras yo yacía semi-muerto en aquel frío suelo junto a esa inocente congelada, Piningozon lanzó una serie de piedras a Billy Jou, siendo inútil contra él. Denis pretendió enrollarle con la cuerda de su gancho, pero Billy Jou rajó toda la cuerda de una simple pasada con su afilada espada. Ryu movía su espada a gran velocidad pretendiendo cortar al pez mutado con la fuerza del viento que provocaba con su fuerza, pero no le hizo efecto. Josel por su parte recogió las flechas que le lanzó al falso Billy Jou y se las intentó lanzar al real sin imaginarse que éste las cogería al aire y se las doblaría delante de todos nosotros.

Arius, atónito, sabía que con mi ayuda sería más fácil de vencerle, así que gritó desesperado que si había algún médico entre los que estábamos presentes.

En aquel momento, Billy Jou desapareció sin dejar rastro alguno y sin dar señal de que regresaría.

Al darnos cuenta de su desaparición, Piningozon me preguntó por mi estado mientras que Josel admitió que él podría curarme ya que trabaja en el hospital siendo médico.

Aprovechando la ausencia de aquel monstruo, Josel les ordenó al grupo que le llevasen a la pingüina para comenzar con su labor y sacarle el hígado.

A decir verdad, no os puedo detallar cómo estaba abriendo a la pingüina ya que yo seguía malherido y viéndolo todo borroso y distorsionado. Sólo sé que la abrió por la mitad.

Mientras Josel abría el estómago de aquella mujer, Ryu sacó una especie de pincho enorme y dijo que con eso ensartaríamos a Billy Jou, así que yo quise preguntar que dónde estaba porque fui el único que no se enteró de su desaparición.

Y justo cuando abrí la boca...

Tras su inesperado regreso, me atacó por sorpresa arrancándome el corazón despiadadamente.

Parecía mi final. Me había quedado sin corazón, lo extraño era seguir con visa, pero notaba que me moriría en pocos segundos.

Aquél pez fue el villano más macabro, mas poderoso, y a la vez, más enfermizo, pues no tuvo ninguna compasión en arrancarme el corazón de cuajo.

Mis amigos, más enfurecidos que tristes, fueron a por él exigiendo que les devolviesen mi corazón mientras le amenazaban de muerte a lo que él respondió que nunca se los daría.

Tras dejarme moribundo en el suelo, se fue a pesar de que Ryu y Denis lo tenían acorralado...

Es super veloz.

Piningozon gritó a Josel desesperado para que me pusiera primero el corazón de aquella mujer y luego el hígado.

Josel, nervioso tras haberme perdido, arrancó el corazón de aquella pobre mujer, la tiró de la mesa y después de eso, Ryu y Denis me colocaron sobre la mesa.

Mientras Josel me operaba en mis últimos segundos de vida, Ryuzaki ideó un plan para asesinar a Billy Jou de una vez por todas:

Al principio nos negamos a aquel plan ya que lo mencionó antes, pero se basa en aprovechar el cargamento de dinamita que le dejaron en aquel barco para explotar toda su base secreta, y los inocentes no iban a ser un problema ya que les rescataríamos.

Poco a poco empecé a despertar.

Lo primero que escuchaba era a Josel, pues me hablaba aún sabiendo que yo no podía escucharle. Me daba ánimos y me decía que estaba saliendo todo bien. En aquel momento me alegré muchísimo de tenerlo a mi lado, igual que al resto de amigos que estaban haciendo lo posible por mantenerme con vida (o revivirme, ya no sé cómo considerarlo).

Escuché a Denis gritando que mi corazón empezaba a latir de nuevo, y a continuación Pinin gritando aparentemente emocionado.

En aquel momento, pude despertar por completo.

Notaba dolor en todo el estómago al hacer un mínimo movimiento, sin embargo las hazañas de Josel lograron, sin duda, revivirme utilizando el corazón de aquel inocente sacrificio.

La felicidad era lo único que nos poseyó tras mi regreso a la vida, sin embargo...

...aquel miserable tenía otro plan macabro que no sólo me entrometía a mí, sino al resto de mi equipo.

Reapareció, por cierto.

Billy Jou, furioso con Josel, lo encerró en los tubos congelados donde tenía secuestrado a los inocentes.

Luego, se dirigió hacia donde Denis controlaba los latidos de mi corazón, y allí nos explicó que había un botón de autoexplosión, capaz de destruir absolutamente toda su guarida.

Totalmente poseído por la locura, pulsó el botón que pondría fin a nuestras vidas y echó a correr más rápido que un rayo de luz.

La explosión literalmente nos hizo morir, haciendo todo el esfuerzo por revivirme, inútil. Todo el esfuerzo de Josel por hacerme un trasplante de corazón, al garete.

Acabamos todos en el cielo, y a Piningozon, Arius y Denis se les había ido la cabeza, pues dijeron que salieron vivos de aquella explosión y estuvieron buscándome por sitios muy extraños...

Tras pasar unos minutos allí, mi cuerpo y el de Piningozon empezaron a desvanecerse, transformándonos en fantasmas.

Por culpa de nuestra muerte, nos habíamos convertido en fantasmas.

Arius tuvo una gran idea y sacó de debajo de su traje de incógnito una Ouija para comunicarse con los muertos y descubrir cómo revivir.

Sin embargo, antes de que pudiera conseguir algo, tanto él como Denis y Josel se transformaron en fantasmas.

Arius me hizo la pregunta que me causó millones y millones de flashbacks por la cabeza:

Tras esta pregunta, recordé la vez que Espía 54 me asesinó. En aquella época, tanto Dios como el Demonio estaban las 24h del día vigilando el cielo y el infierno. Tras morir, el asesinato de Espia me mandó al infierno y el Demonio me dijo que yo no merecía estar con él, que debía estar con Dios para molestarle por ser un viejo amargado (palabras del Demonio del infierno). Entonces fui al cielo, y fruto del aburrimiento le conté tres chistes si no recuerdo mal a Dios, y éste, tras llamarme pesado, me explicó que en su cielo (en el que acabamos después de la explosión) hay unas gotas mágicas en los árboles que nos reviven y nos dan una vida extra, pero esa vida extra sólo servía con las muertes naturales o por enfermedades.

Así que se los conté. Un poco tarde, sí, pero se los conté al fin y al cabo.

Por cierto, de golpe vinieron más muertos y el cielo se empezaba a llenar.